Saborea esta explosión de sabores creada para ti.

Es el rey de las frutas de otoño. El membrillo es muy apreciado por la elaboración del dulce y la carne que se aprovecha de él. Pero además tiene unas propiedades nutricionales fantásticas. Es por ello, por lo que se utiliza para su consumo tanto en recetas dulces como saladas, y desde los platos más simples a los más elaborados.

Un manjar que puedes consumir en desayunos, meriendas, postres, durante un picoteo con los amigos, o para acompañar como aperitivo en un cóctel. ¡No te lo pienses más! Esta receta de membrillo es una auténtica delicia para llevártela a la boca en cualquier momento.

Disfruta de las diferentes capas del milhojas del sabor más dulce del membrillo con el sabor más auténtico del paté de pato unidos en un mismo bocado. Inspirada en aquella receta tradicional que hacían nuestras abuelas, totalmente natural, a partir sólo de fruta fresca seleccionada, sin conservantes ni aditivos artificiales. El sabor de siempre con toda la calidad y el cuidado que mereces.

 

¡Manos a la obra con el milhojas!

  • Nutrientes que aporta: fibra, potasio, taninos, pectinas, vitaminas A y C
  • Sin gluten

 

Ingredientes:

Para el acompañamiento

  •  150 g de lechuga mezclum
  • Hierbas aromáticas
  • 1/2 tomate
  • 2 tomatitos cherry

 

Elaboración:

  1. Para preparar esta receta con membrillo, lo primero que haremos será trocear el Membrillo Santa Teresa y el foie de pato en finas láminas de medio centímetro.
  2. A continuación, en un plato rectangular comenzamos a montar nuestro milhojas alternando capas de foie, de Membrillo Santa Teresa y de queso de cabra. En la base colocamos una loncha de queso de cabra, sobre ella, una capa fina de membrillo y sobre está, una más de foie. Podemos añadir varias capas según queramos el tamaño de nuestro milhojas.
  3. A continuación, terminaremos de montar añadiendo una última capa de queso de cabra sobre el milhojas y una vez lo tengamos listo, lo reservamos en frío en la nevera durante un tiempo para que vaya cogiendo consistencia.
  4. Una vez haya enfriado y su textura sea firme, cortamos en pequeños rectángulos nuestro milhojas, de manera que nos queden trocitos individuales. Después, para que el plato obtenga un poco más de presencia, caramelizamos quemando la superficie del queso de cabra de nuestra milhojas con azúcar, dándole así un colorcito marrón y un gusto dulzón al plato.
  5. Por último, lo servimos en un plato acompañado de unas hojas de lechuga mézclum, un par de tomatitos cherry y unos trocitos de tomate natural cortado en cuadraditos espolvoreados alrededor del plato. ¡Y ya lo tienes listo para chuparte los dedos!

 

Con qué acompañar esta receta.

El Membrillo Santa Teresa posee un sabor auténtico a fruta y una textura única, por lo que resulta perfecto para combinar con todo tipo de ingredientes.

Puedes acompañar esta receta fácil con unas tostas de pan tostado y disfrutarlo mejor untado o elige unos picos con unos frutos secos.

¡Y escoge la mejor alternativa para la comida o el snack con tus invitados más especiales!

 

Sabías que…

Antiguamente se pensaba que los membrillos eran un tipo de manzana y se consumían asados con miel y cubiertos con una capa de harina. Con el descubrimiento y el mayor empleo del azúcar, se comenzó a elaborar el dulce de membrillo que hoy conocemos. Además, se usaban no sólo como alimento, sino también como remedio eficaz contra las indigestiones. Esto te da una idea de las grandes propiedades que te ofrece esta fruta.

Nos ayuda a bajar el nivel de colesterol, la hipertensión, mejora el tránsito intestinal gracias a su gran aporte de fibra y tiene efecto desintoxicante debido al ácido málico que contiene. Además, combate la retención de líquidos y, por su gran fuente de potasio, ayuda a nuestro sistema muscular y nervioso.

 

No olvides que puedes encontrar el Membrillo Santa Teresa y otros productos de la marca Santa Teresa en nuestra página web, en los distintos centros gastronómicos Santa Teresa Shop, o en grandes superficies.